Coprocesar es ingresar desechos al horno cementero para su disposición final, de tal forma que no se generen nuevos residuos, cenizas o emisiones. Se denomina así porque se desarrolla de forma simultánea con la producción de clínker (componente del cemento). Es una operación ambientalmente segura, económicamente viable, y de práctica común en el mundo, que aprovecha las altas temperaturas del horno cementero (hasta 2 000ºC), el prolongado tiempo de residencia y la elevada turbulencia a la que están sometidos los materiales.

En el coprocesamiento los residuos urbanos e industriales son utilizados como combustibles alternativos.

Estos pueden ser: sólidos, como llantas usadas, plásticos, textiles, aserrín y madera, residuos de la producción papelera, plásticos y combustibles; o líquidos, como aceites minerales usados, disolventes, pinturas, barnices y residuos de hidrocarburos.

Algunos residuos, como los aceites usados o las llantas, pueden ser utilizados en el proceso de producción sin ser procesados. En el caso de los residuos sólidos urbanos, debido a su composición heterogénea, es necesario llevar a cabo procesos de pretratamiento, para evitar la utilización de materiales que puedan ser dañinos para el equipo de producción o el medio ambiente. Las plantas de tratamiento de residuos se encargan de procesar los residuos antes de enviarlos a las plantas de cemento.

La economía circular se define como el sistema de producción, distribución y consumo que busca mantener en la economía, por el mayor tiempo posible, el valor y vida útil de los productos, materiales y recursos. Buscando reincorporar a los residuos en los procesos productivos.

En México, la industria del cemento contribuye a la transición hacia una economía circular mediante el coprocesamiento. Este mecanismo es considerado como un criterio de economía circular, ya que elimina los residuos mediante la valorización energética, lo que permite reducir la huella de carbono y optimizar el aprovechamiento de los materiales.

• Disminuye emisiones de gases efecto invernadero (GEI)
• Es fuente alternativa de energía
• Herramienta complementaria para la gestión de residuos
• Evita el depósito de residuos en vertedero
• Elimina técnica y ambientalmente los residuos industriales de forma segura
• Reduce el consumo de combustibles fósiles
• Contribuye a la salud pública al evitar la propagación de enfermedades
• No genera ningún residuo al final del proceso de coprocesamiento

El coprocesamiento es una de las principales palancas de descarbonización consideradas en la Hoja de Ruta de la Industria del Cemento para lograr una reducción en las emisiones directas de CO2 en el proceso productivo.  La Hoja de Ruta establece que para 2030, la industria busca incrementar la tasa promedio de coprocesamiento hasta un 32%.

De acuerdo con proyecciones de SEMARNAT, el aumento en la tasa de coprocesamiento hasta más de un 30% podría significar que para el 2030, más de tres millones de toneladas de residuos podrían ser coprocesados en los hornos de cemento anualmente.

Es importante mencionar que alcanzar los objetivos de la Hoja de Ruta depende de consolidar marcos regulatorios, el financiamiento verde y el trabajo colaborativo entre las distintas partes interesadas, tales como academia, industria, clientes y gobiernos.